Samsung acaba de presentar en la Argentina su ST500, una cámara fotográfica con dos pantallas de LCD. Una convencional, de tres pulgadas, y otra frontal. Esta última sirve para encuadrar bien los autorretratos. Pero Samsung le encontró dos usos más: muestra la cuenta regresiva cuando está activado el autodisparador, y proyecta dibujos animados para llamar la atención de los chicos y hacerlos sonreír para la foto. La ST500 cuesta unos 1.800 pesos.