Cada una de las 113 teclas del Optimus Maximus es una pantallita programable por el usuario, capaz de reproducir imágenes fijas o en movimiento. La idea es que cada tecla muestre en cada momento la función o el carácter (de cualquier grafía) asignado a ella. El teclado, creación de Art. Lebedev Studio, una firma rusa, cuesta 1.565 dólares. Los primeros se entregarán en diciembre, y por ahora sólo se producirán 800 unidades.